Atarse los cordones para un niño de 5 o 6 años, resulta un gran desafío y un gran reto a conseguir. Implica una actitud favorable para alcanzarlo con dedicación, práctica y perseverancia. La guía y acompañamiento adulto respetuoso que aliente y no obligue será fundamental.
Por lo tanto, conseguirlo, no sólo le dará más autonomía. Hacerlo de forma agradable será fundamental para seguir alimentando la confianza en sí mismo y en sus posibilidades con la actitud positiva para este y demás aprendizajes.
Hoy son los cordones. Mañana puede ser un problema de matemáticas, o con los amigos. En todas las situaciones, necesitará las mismas habilidades de dedicación, práctica, perseverancia y actitud positiva necesaria para la vida.
Cómo enseñar a los niños a atarse los cordones.
Antes de ir al aprendizaje directo de los cordones, es importante preparar de forma indirecta este reto. Y para ello, te invito a que estés atento como padre y madre para utilizar las situaciones de juego que muestre interés y se encuentre motivado para poner en práctica requisitos importantes que le faciliten la consecución de este logro.
Algunos de ellos:
Enséñale a usar los dedos. Puede ser a través de manualidades, haciendo cabañas, pulseras, o reparación de cualquier material que se le haya estropeado, en donde se requiera hacer nudos sencillos y acompañarle a hacerlos.
Espera a que haya alcanzado la maduración de la motricidad necesaria para saber que está preparado. La motricidad fina que requiere para coger con eficacia los cordones, es la llamad a pinza. Es un movimiento de más precisión que lo realiza con los dedos índice y pulgar. Toda propuesta que puede poner en práctica esta motricidad, le seguirán preparando para conseguir con éxito atarse los cordones. Así que te invito a que aproveches también los contextos significativos como: pintar con pinceles, rotuladores, pinturas o cualquier actividad que requiera desarrollar la destreza motriz de estos dedos de la mano. Puedes comenzar desde los 2 años y medio.
Atención a su interés y necesidad para comenzar este aprendizaje.
Si tiene todos los zapatos de velcro o goma, no le generará la motivación para poner en práctica estas habilidades necesarias porque el reto no lo considera necesario. Si tiene unas zapatillas con cordones que le gusta y quiere ponerse, evidentemente, el interés y motivación por aprender a atarse los cordones, aumentará considerablemente.
Guía de verdaderas ayudas desde el acompañamiento adulto. Puedes primero mostrarle cómo lo haces. Después dejar que lo haga tu hijo con tu ayuda de forma muy respetuosa y cuidada para que se sienta guiado y no mandado. Luego él sólo y tú, con tu presencia y disponibilidad, le observas cómo lo va haciendo por si necesita ayuda. Y ya, en la última fase de verdadera ayuda, te vas retirando para que lo realice sólo. Repite cada paso inicial tantas veces sea necesario para ir descendiendo tu ayuda de forma progresiva y vaya aumentando sus ganas de conquistar este reto cada vez con más autonomía.
Sostener expresiones incómodas como la frustración o enfado al no conseguirlo a la primera. Validar los sentimientos para que se sienta comprendido en este momento, le dará el aliento que necesita para sentirse comprendido y escuchado. Sobre todo, el permiso a estas expresiones es lo que le ayudará a transitarlas y superarlas para recoger el aprendizaje desde la propia transformación emocional agradable. Dar tiempo para este proceso desde tu acompañamiento adulto.
Hacer y practicar el nudo de base de los cordones: hacer una X o una cruz, cruzando los extremos de los cordones. Uno de los cabos se puede convertir en una culebra (u otro animal) que entra o sale del lago que se forma. Tirar y apretar de los dos cabos hasta que el nudo simple quede ajustado. Puedes probar en en otros contextos diferentes a los zapatos, y después, practicarlo con sus propios cordones.
Cómo atarse los cordones paso a paso
Te voy a mostrar dos técnicas después de haber conseguido hacer el nudo base explicado anteriormente. Son muy parecidas. La primera, es más sencilla porque permite liberar las manos de los cordones y facilita así el proceso. La otra, necesita agarrar las lazadas con las manos sin soltarlas.
Esta es la primera técnica que puede liberar sus manos:
- El cabo del cordón entra por donde sale. Introduce un poco el extremo, cabo, por el último agujero. A veces hay zapatillas que tiene dos agujeros últimos cercanos que uno se queda inutilizado. Puede aprovecharlo para esta técnica.
- Lo mismo con el otro cabo del otro cordón. Hasta aquí, la forma de los cordones son de dos lazos que se mantienen soltando las manos.
- Juntas cada lazo como si fuera un cordón, quedando dos cordones dobles. Haces un nudo simple cruzando ambos cordones dobles.
- Repites otro nudo sobre el anterior, para que el cordón quede bien sujeto.
Segunda técnica con más agarre en los cordones:
- Hacer dos orejas o dos lagos con ambos cordones.
- Juntar cada oreja o lago para convertirla en un cordón doble.
- Hacer con cada cordón doble un nudo simple y apretar nudo.
- Repetir el nudo simple para que esté más apretado.
Juego para aprender a atarse los cordones
Aquí encontrarás ejemplos de juegos para aprender a atarse los cordones:
- La historia con animales: el conejo. Le dices al niño que debe hacer una cruz con los cordones. Luego, doblar cada cordón de la zapatilla para formar dos orejas de conejo. Pero los conejos quieren entrar en su madriguera. Para eso, deben dar la vuelta entre sí para entrar juntos y pasar a la cueva por el agujero.
- Historia del lago: un lago con un cordón y con el cabo de otro cordón, da la vuelta al lago y sale o entra al agua, dependiendo del cruce del nudo.
Rima para aprender a atarse los cordones: ‘Los cordones se sueltan si no los puedes atar. Te cuento una cosica y muy pronto aprenderás. Tomando las dos puntas una cruz has de formar. Pasa uno por la cueva y ahora lo estirarás. Observa, verás, se formó un nudo. Llévalo hasta abajo sin ningún apuro. Toma un cordón, forma una orejita. El otro lo abraza y se mete en la cuevita. Cuando ya estén las dos orejitas, con un nudo en el medio quedarán más coquetitas’. - Cuento en vídeo.
Manualidades para aprender cómo atarse los cordones
Aquí encontrarás manualidades previas para practicar y prepararse a atar los cordones de forma indirecta y de forma directa con los cordones. Algunos de ellos:
Cartón de nudos. Con una simple tira de cartón, hacer agujeros paralelos y practicar nudo simple.
Hacer pulseras de pajitas de comida. Tiene un efecto muy interesante y se practica con la destreza motriz fina y perseverancia. Recortar las pajitas de la misma largura. Con una cuerda fina, enhebrar la primera pajita cortada, dejando la misma largura de la cuerda en ambos extremos. Cada cabo de la cuerda, pasa cada extremo de otra pajita. Uno entra por un lado y el otro cabo, por el otro. Se cruzan en el interior y se tira de la cuerda para que las pajitas se junten. Así sucesivamente.
Pulseras de macramé o nudos en espiral. Con dos hilos de nylon o de macramé, que tienen un grosor de unos 0,5 cm, los unes con un nudo. Con un un imperdible lo agarras a un cordón que se puede colocar en el muslo de la pierna para que pueda sujetar los hilos de la pulsera. Y hacer nudos simples con el mismo color de hilo para que haga un efecto de espiral. Se puede hacer los nudos con el otro hilo que si es de otro color, quedará un efecto muy interesante.
Collares de macarrones. Con una cuerda, enhebrar los cilindros pasando por un cabo uno tras otro. Pueden haber sido pintado los macarrones.
Enhebrar distintos objetos con agujeros.
Hacer lazadas de diferentes formas con ayuda de un tenedor. Mejor con uno grande de madera.
Caja de zapatos como plantilla de cordones Puedes dibujar en una hoja la silueta del pie de tu hijo. Lo recortas y lo pegas en la base exterior de una caja de zapatos. Así, puede coger la caja como si fuera su zapato, y meter el cordón por los agujeros de la plantilla las veces que quiera.
Vídeos para aprender cómo atarse los cordones.
Canción para atarse los cordones.
Indicaciones para aprender a atarse los cordones.
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